Cada vez que estoy sin tí, la razón de mi universo muere.

Podrá nublarse el sol eternamente, podrá secarse en un instante el mar, podrá romperse el eje de la tierra como un débil cristal, podrá la muerte cubrirme con su fúnebre crespón pero jamás en mí podrá apagarse la llama de tu amor.

En mis sueños te conocí, en mis pensamientos me enamoré y en mi vida te amaré.

Es triste mirar el mar en una noche sin luna, pero más triste es amar sin esperanza alguna.

Por querer olvidarte me está matando el dolor, y aunque mi rostro sonría me estoy muriendo de amor.

La distancia nunca será un impedimeto para mí. Te amo y te amaré siempre nunca me rendiré, por que sólo tu racuerdo me hace sonreir y ser feliz.

Si supieras lo que yo te quiero no andarías por ahí con otras chicas pensando tan poco en mí.

Una tarde fresca en tus ojos me miré, y fue tan dulce tu mirada que de ti me enamoré.

Amar a la persona no indicada no es un pecado, es un castigo de Dios.

Nunca creí en el amor, es más, aún no creo sólo creo en que tu me robaste el corazón.